Rechinar dientes contra dientes hasta que la mandíbula se desfigure por presión. ¿Realmente creías que era sólo sentimiento?  Me sorprendería que puedas quedar más vacía, yo no espero compasión vía vida, inicuo aunque reclames, nunca te despidas ni despistes. Y todos deberían imitarme, si no alcanzás ni a cubrirte los ramalazos repentinos. Llevaré la fisonomía al perfecto extremo, y con pulida delicadeza me aniquilaría con un centímetro cúbico más de hipersensibilidad dentro de mis arterias. Y que sujeta a la anomalía se quiere mostrar toda disposición dentro de mi cuerpo, casi siempre impedida por no quererme ni un poco, aunque los titulados exsitan por quimeras; falta de devoción, me afecta, quizá, solamente a mí día de por medio, bruto desencuentro. Clavaré sus bonitos y chiquitos pedacitos de personalidad despierta en las lastimaduras de mi pecho y en mi corazón de orgullo. Usaré uno de mis domingos para (en vez de pelear contra delirios extravagantes) acomodar nuestras penas en un espacio anti-olvido.  

foxy lady®

Flechas

Te prometo volver a mí algún día, rogame, así aprendí a doler ; 

con escrúpulos entre escalofríos

Sentí paranoia con el choque, diez paredes se distorcionan fácil.

(si se toma miedo entre los cuatro) sobre un cuerpo con sed.

Fui de esas que no aguantaron y no pidieron perdón por no hacerlo

que se las tragó la tierra, que les costó respirar.

Pensé en azulejos;

Moví piel.

metamorfósis, no soy igual desde que me crecieron las espinas

desde que perdida náufraga, por dolencia

de tu risa psicótica que habla sola, 

 Había luz de carcajadas, datos grises.
personalidades ya quemadas,

teníamos sábanas y hoy por hoy no somos nada.

Dilemas de Placer

Disfrutá del sol y cómo tu piel suave sigue.

Existen lunares infectados, pero nos gusta ocultarlos; siniestros seres sobervios: ¡Son felíces como vos!
Estamos motivados por sensaciones que no te suenan, la luz tambièn tiene sus esclavos.
Ahora no te preocupes tanto, aujeros de tu historia sobrarán; representarán dolor de tu histeria.

Te voy a abrazar tan filoso hasta que rías sangre 

y vomites tus dolores, hoy no es un día de paranoia.

Justo como a mí. Te creo. Te voy a salvar.

No estoy hecha de papel sólo me manifiesto mediante él.

Nada de rencores¿ya te dije que estaba hecha de magia?

Quiero entrar. Te creo. Te voy a salvar.

Es un don no ser biónico, todo pasa por el tacto (ni tus pupilas pesan). 

No estás cansado, algo de pasado intravenoso puede serte denso.

Pero el eje son los valores por análisis y no por miedo.

Si es necesario clavar, adelante. Estoy (a tu lado) siendo esto.

No sé, mas dar amor, perdón.

Savior

Detesto confesar que será la última (auto-repetición constante, cuesta) en su nombre, mas nunca llegará a destino, el receptor se suicida con el texto. Aunque no me hartè de escribir sobre paredes esquizofrènicas, parece a nadie influencian mis párrafos, manifestaciòn de mi ausencia, ¿Me justifico?
Te malecì en el instante que me costò respirar, me apenan tus trazos de lápiz a seguir, aunque las mejores intenciones, quise darle un cierre a ésto y por tu miedo tuve que morderme toda; hay dolores que prefiero guardar para mì, hay rencores que prefiero suicidar. No saciè ningùn ego, nada de ésto fue justo (para ninguno, entre los dos)

No buscarè a nadie ni a nada, menos siendo una sensasiòn tan áspera, pero tengo todas las de dudar el encuentro de egoísmo en naturaleza tan concentrada como tras tus costillas, como nato, de tus brazos tatuados, de tu olor a humo en los ojos.

¡Súper maduro! Igual que a los catorce, pero con seis màs arriba, nadie se mató por vos; ¡Súper considerado! Me arrastraste a tu mierda, te enervaba la idea de que me ponga a tu par, que no me quede estancada. El único con derecho tenía que ser el que no se baña.

Desde que me apuñalabas,
mintièndome en la cara
persiguièndome por la calle
seguir de falso entre mis espinas.

A vos te saciaba la relaciòn sádica, no me tomo el lujo de usar tercera persona, fuimos vos y yo, y fuimos. No te interesò por segundos siquiera si me hacìas mierda, que chamuyes tan bruto frente a mi pendejo cuerpo. Porque vomitaste las palabras recién cuando podías llegar a tener una suerte de cuartada barata, vos y yo nunca a la par (en claro), no me dejabas escapar, me retenías cuando yo necesitaba liberarme, me habías dejado destrozada
Nada he de joderme tanto los intestios como abandonarte, no te quieras llevar lo que me queda de especial, que el resto te lo cogieras me hirió superficial nada más (ahora tengo traumas objetivos para re-relatar)
Y no voy a mandar a ningún órgano a detestarte, mas te hiciste sola la enfermedad y me contagiaste: agudamente inútil y sumamente fea ¿Felíz? perdí respeto hacia el espejo.

como factor no haberte podido enamorar,
como condición ser la humillada,
como consecuencia tener que despegarnos.
para siempre y despès del para siempre, como de entrada, cuando juré seguir con ésto aunque me tiemblen los tobillos, se arruinó. Me despido.