Rechinar dientes contra dientes hasta que la mandíbula se desfigure por presión. ¿Realmente creías que era sólo sentimiento? Me sorprendería que puedas quedar más vacía, yo no espero compasión vía vida, inicuo aunque reclames, nunca te despidas ni despistes. Y todos deberían imitarme, si no alcanzás ni a cubrirte los ramalazos repentinos. Llevaré la fisonomía al perfecto extremo, y con pulida delicadeza me aniquilaría con un centímetro cúbico más de hipersensibilidad dentro de mis arterias. Y que sujeta a la anomalía se quiere mostrar toda disposición dentro de mi cuerpo, casi siempre impedida por no quererme ni un poco, aunque los titulados exsitan por quimeras; falta de devoción, me afecta, quizá, solamente a mí día de por medio, bruto desencuentro. Clavaré sus bonitos y chiquitos pedacitos de personalidad despierta en las lastimaduras de mi pecho y en mi corazón de orgullo. Usaré uno de mis domingos para (en vez de pelear contra delirios extravagantes) acomodar nuestras penas en un espacio anti-olvido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario